Cerrejón y Drummond disminuyen sus operaciones

En sendos comunicados, Cerrejón y Drummond anunciaron en las últimas horas que van a disminuir sus operaciones de extracción carbón, por cuenta de la crisis del coronavirus y para reducir las posibilidades de contagio entre trabajadores, sus familiares y la población.

De acuerdo con las empresas, lo hacen asegurar la efectividad de los controles y recomendaciones de las entidades gubernamentales.

Según Cerrejón, “se hará de manera progresiva una vez estén garantizadas las condiciones de seguridad para empleados, contratistas y comunidad, para lo que esperamos contar con el apoyo de las autoridades nacionales, regionales y municipales, de los sindicatos y de todos los trabajadores y contratistas. Para llevar a cabo este proceso de manera responsable y evitar riesgos relacionados con un cese de las actividades, este se llevará a cabo de manera escalonada a partir del turno nocturno del 23 de marzo y por las próximas 48 horas, en las áreas que requieren mayor movilización de personal”.

Por su parte, Drummond aseguró que si bien el Decreto 457 de 2020 cobija la continuidad de las operaciones mineras, “y ya veníamos implementando medidas sanitarias estrictas para proteger a nuestros empleados, nuestras operaciones se deben reducir para cuidar aún más a nuestros empleados, minimizando al máximo la concentración de personas, atendiendo a su vez a las preocupaciones de las comunidades locales sobre la propagación del virus, que han contribuido a dificultades adicionales relacionadas con logística y transporte. Esta disminución de actividades en nuestras minas ya se está llevando a cabo por etapas”.

Agregó que “varios países, en particular naciones latinoamericanas cercanas, así como muchos otros alrededor del mundo, dependen de la continuidad de nuestras entregas de carbón para generar la energía eléctrica que necesitan, ahora más que nunca, para su vida cotidiana y para afrontar la emergencia del covid-19”. Ni Drummond ni Cerrejón advirtieron en sus comunicados cuál es la reducción de los niveles de producción.

Las dos empresas dijeron que mantendrán sus ayudas a las regiones y su inversión social. Cerrejón señaló que se mantendrán las inversiones sociales esenciales para las comunidades y los recursos necesarios para llevarlos a cabo. Entre otros, estos compromisos incluyen la distribución de cerca de 7 millones de litros mensuales de agua en los cuales la movilización férrea es un recurso fundamental, con una inversión de más de 2.000 millones de pesos al año.

“Además, se coordinarán acciones con el departamento y las alcaldías de las áreas de influencia para ofrecer apoyo específico en temas de salud, por un monto de 2.000 millones adicionales, para afrontar esta situación”, dice el comunicado.

A su vez, Drummond dijo: “Seguiremos trabajando para mantener nuestros compromisos con ellas (las comunidades) y seguiremos ejecutando nuestros programas de responsabilidad social. Así mismo, hemos destinado importantes recursos adicionales para ayudas humanitarias en nuestra área de influencia, que serán invertidos en auxilios tanto para la población más vulnerable, como en suministros para el personal médico en el marco de la emergencia”.

La crisis del coronavirus llega en un momento complejo para la industria minera, pero en especial la carbonera en el país. La tendencia global de buscar alternativas a la generación con carbón, tiene a esta acividad en jaque. Regiones como Europa han advertido su reducción de pedidos y la transformación de su matriz energética en los próximos años. Sin embargo, en otras partes del planeta, aún hay un alto consumo, como Asia, en donde se están además ejecutando nuevas tecnologías para minimizar el impacto ambiental.

Según la Asociación Colombiana de Minería, en 2018 el país exportó 84 millones de toneladas, el año pasado, hasta el tercer trimestre iban 64 millones. “Las decisiones judiciales y el activismo social en torno a los proyectos actuales de carbón han hecho que en los últimos dos años hayamos perdido 10 millones de toneladas”, dijo Juan Camilo Nariño, presidente del gremio a Dinero en una reciente entrevista.

Además, esta crisis llega en un momento complejo para Cerrejón, por el conflicto laboral que enfrenta, dada la discusión de la convención colectiva.